Hoy en día todo gira en torno a cuándo estará disponible una vacuna contra el COVID. Sin duda será la vacunación más grande de la historia moderna, con un número sin precedentes de personas que recibirán la vacuna. Por lo mismo, para manejar el aumento de pacientes, y mantenerlos tanto a ellos como al personal seguros (y cuerdos) se hace necesario planificar una estrategia de vacunación contra COVID con mucha anticipación.
Un Marco de tres fases para la estrategia de vacunación
Para maximizar un flujo de pacientes de alto volumen mientras se mantiene la distancia social, se necesita una estrategia flexible que se pueda ajustar a una variedad de escenarios.
Como marco para la estrategia de vacuna contra el COVID, los CDC han delineado, al menos por ahora, tres fases anticipadas en la administración de la vacuna:
En la Fase 1, las poblaciones de alto riesgo recibirán una distribución limitada de dosis de la vacuna.
Estas poblaciones se identifican tentativamente como:
- Trabajadores de la salud
- Trabajadores esenciales no ralacionados con salud
- Adultos en riesgo de infecciones graves por COVID
- Personas mayores de 65 años
En la Fase 2, una gran cantidad de dosis estarán disponibles para la población en general (además de todas las personas de alto riesgo que aún no se hayan vacunado).
En la Fase 3, las vacunas estarán ampliamente disponibles y los proveedores comenzarán a integrarlas en sus programas de vacunación existentes.
Todo esto seguramente llevará a enfrentar desafíos específicos a lo largo de cada fase: la programación y los recordatorios, el flujo de pacientes y la comunicación son solo algunos. Son muchas variables complejas en juego, y la tecnología de seguro será parte de la estrategia de vacunación.
Los recordatorios de citas para la vacuna COVID son fundamentales
Si aún estás programando citas manualmente, es el momento de considerar un sistema automatizado de programación de citas.
Cuando los pacientes pueden programar citas de vacunas de acuerdo con sus variables y horarios, el personal del centro asistencial puede quedar libre para pasar más tiempo con los pacientes, y ahora, eso es esencial.
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Pero no es solo la cita inicial para la vacuna lo más importante. Recientemente, el CDC ha delineado dos posibles escenarios de cómo sería la vacunación:
- Vacuna A: Dos dosis, con 21 días de diferencia
- Vacuna B: Dos dosis, con un mes de diferencia
De cualquier manera, la vacunación exitosa probablemente requiera dos citas. Así que si un paciente no programa la segunda cita (o no se presenta), debe comenzar todo el proceso de nuevo, desperdiciando el inventario, el tiempo del paciente, el del proveedor, y aumentando su tasa y costo de no presentación.
Por lo tanto, los recordatorios de citas para la segunda dosis desempeñan un papel fundamental en su estrategia de vacuna COVID.
Es por eso que un sistema de programación con una función de recordatorio automatizado reduce el tiempo que el personal dedica a las llamadas, asegura el cumplimiento de la vacuna y, en consecuencia, la eficacia de la misma.
A continuación te mostramos otras acciones que garantizan que tu estrategia de vacunación COVID tenga una planificación más fluida:
- Programa la cita de la segunda dosis de un paciente antes de que salga de su primera cita.
- Aprovecha los múltiples métodos de recordatorio: tarjetas de citas, recordatorios por correo electrónico y mensajes de texto.
- Al programar citas y recordatorios, brindale a los pacientes información clara y detallada sobre lo que pueden esperar cuando lleguen.
Evite el Hacinamiento Con La Gestión De Capacidad
Con la incorporación de un flujo de trabajo para las vacunas COVID, la gestión del flujo de pacientes en sus instalaciones será aún más compleja y crítica. La nueva plataforma "Q-Anywhere" combina la programación de citas y las plataformas de gestión de colas con tecnologías virtuales que te permiten limitar el número de pacientes en tu centro sin sacrificar su experiencia.
Pero el hecho de que los pacientes esperen más cómodamente en el lugar que elijan (su automóvil, una cafetería, al aire libre) no significa que quieras hacerlos esperar. Por eso, es necesario que mantengas una comunicación frecuente y constante con ellos que les permita obtener información sobre su cita, su lugar en la cola, cuándo los llamarán, qué hacer y adónde ir cuando los llamen. La mensajería automatizada, los portales seguros y los chats de video son algunos de los ejemplos que los pacientes percibirán como un trato rápido y justo.
Difusión y comunicación sobre vacunas
La comunicación adicional requerida para el flujo de la vacunación COVID puede llevar más tiempo, pero es esencial hacerlo bien.
Tienes que tomar en cuenta que cada estado, localidad e incluso instalación puede tener diferentes procedimientos establecidos, además de la orientación del gobierno, por lo que tu centro tendrá necesidades únicas para comunicarse con los pacientes y el personal.
Desde preguntas de detección de COVID hasta los factores de riesgo de un paciente, el flujo de la vacunación COVID cambiará de acuerdo con tus respuestas, así que tienes que tener la capacidad de:
- Priorizar las poblaciones en riesgo sin perjudicar al resto de los pacientes.
- Separar eficazmente a los pacientes enfermos de los demás: asegurarse de que sepan dónde ir antes de ingresar a las instalaciones.
- Agregar la vacuna COVID a una cita no relacionada con un paciente, pero asegurándose de no afectar negativamente el flujo de pacientes.
Como te darás cuenta, Q-Anywhere te permite elegir su funcionalidad de acuerdo con muchas variables, lo que te permite tener a las personas en las habitaciones adecuadas, durante el momento adecuado y el equipo adecuado, todo ello manteniendo el distanciamiento social.
Y es que la acumulación de citas que los pacientes tendrán debido al COVID, la temporada de gripe y la alta demanda de la vacuna en sí podría abrumar fácilmente incluso a las organizaciones más capaces si no están preparados.
¡Pero no tiene por qué ser así para ti! Q-Anywhere existe justamente para ayudar y para eso te invitamos a que conozcas cómo nuestro nuevo enfoque para la programación de pacientes, las colas y el flujo de trabajo ayudó al NHS a maximizar el flujo de pacientes y mejorar la prestación de atención durante esta “nueva normalidad”.
